Dentro
de pocas fechas tendrá lugar la fiesta cristiana del Día de la Ascensión.
La
Ascensión de Cristo. Icono rumano sobre vidrio.
Segunda mitad del siglo XIX,
zona de Fagaras.
En Rumania,
aún sin ser festivo laboral, la tradición manda festejar este día de modo
parecido al de la Resurrección, también a nivel gastronómico.
Lo más
llamativo para los foráneos suelen ser los huevos pintados.
En
el departamento de Suceava hay incluso un museo dedicado a este fenómeno etnográfico
asiduamente buscado por los turistas que llegan a estos lugares – y con razón.
Aquí
podrán ver huevos pintados de pájaros y reptiles, con tamaños muy variados. Los
hay de pato, pavo, pintada, emú, ñandú, tortuga, cocodrilo, flamenco, salamandra,
perdiz, gorrión, paloma, avestruz, etc.
La página
web del museo tiene versión castellana.
Pero
como dicen “lo bueno, si corto, dos veces bueno” os dejo con las imágenes del
museo.
También
vera más fotos en su página FB
Y no
se olviden de enviarles vuestras fotos a Dª Letitia (la reina del lugar). Os lo
agradecerá.
Como
siempre, encontrarán este artículo y otros más en la página de Facebook Auténticamente,
Rumania
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